viernes, 28 de agosto de 2009

Conciencia y conocimiento, por Fernando Gutiérrez Almeira

CONCIENCIA Y CONOCIMIENTO
por Fernando Gutierrez Almeira

El conocimiento solo existe en la acción misma de conocer…no es pensable sin contradicción fuera de ella…Y como esta acción es precisamente la acción conciente podemos decir, atando los cabos, que no hay conocimiento sin conciencia del mismo modo que no hay conciencia sin conocimiento. En el acto de conocer debemos distinguir, a su vez, el sujeto que conoce, la conciencia, de lo conocido, aquello que es objeto de conocimiento para la conciencia. Hay quienes pretenden que un conocimiento puro vendría a ser un conocimiento puramente objetivo pero como podemos notar desde un principio esto es imposible pues todo acto de conocer implica tanto lo objetivo del objeto conocido como lo subjetivo de la conciencia que conoce. Así pues, no hay un conocimiento puro nunca, un conocimiento sin sujeto ni hay tampoco una pura conciencia sin objeto como algunos místicos pretenden imaginar.

Descartados, por un lado, el extremo místico de una pura conciencia con un puro conocer sin objeto que le sea independiente y el extremo ideal de objetividad del que abusan algunos amantes de la ciencia lo que debemos pensar es que el acto de conocer es un proceso en el que una conciencia se involucra con un objeto como sujeto cognoscente y que en este involucramiento se vuelven borrosas las fronteras entre lo que pertenece a la conciencia por un lado y lo que pertenece al objeto por el otro. Tratar de establecer una frontera más o menos nítida entre lo subjetivo y lo objetivo es tarea siempre necesaria según el caso pero no una tarea que pueda realizarse perfectamente alguna vez.

¿Qué capta la conciencia del objeto al cual conoce? No lo capta como tal, no como si lo estuviera absorbiendo físicamente. Se trata más bien de una absorción mental. ¿Qué absorbe la conciencia de su objeto? Lo que absorbe es su forma…de variadas maneras…como imagen, como complejo de percepciones, etc. Podemos decir, para resumir rapidamente la cuestión, que la conciencia se IN-FORMA del objeto al dirigirse hacia él…y esta información toma la forma básica de la memorización. La conciencia memoriza al objeto informándose de él al dirigirse hacia él. ¿Y cómo se dirige hacia él? Se dirige hacia él percibiéndolo, experimentándolo, interactuando, en fin, con él. Por supuesto que como se trata de una interacción el proceso de conocer implica un cambio en la conciencia (que queda in-formada por el objeto) y un cambio en el objeto (que queda experimentado por la conciencia). Y como estas modificaciones son inevitables nunca una conciencia podrá tener conocimiento sin cambiar ella misma de estado…el conocimiento altera a la conciencia…y nunca un objeto podrá ser conocido tal como es sino solo como un “objeto de la experiencia de la conciencia”.

La alteración de la conciencia por el proceso de conocer implica que en ella aumenta la información que posee de los objetos hacia los cuales se ha dirigido prestándoles su atención. Esto podría decirse que saca a la conciencia de su desinformación pero no necesariamente de su ignorancia, pues la información que capta una conciencia no necesariamente le orienta en la existencia, mucha de esa información puede ser irrelevante para sus fines…y será menos ignorante la conciencia en cuanto capte información que sea relevante para sus fines. Y aún este conocimiento tiene cierta relatividad pues los fines de una conciencia son relativos a ella y difícilmente serán los fines mismos de la conciencia en general…los fines del conocimiento. ¿Cuál será la finalidad general del conocimiento? Pues, si nos ponemos a pensar un poco, el conocer mismo puede ser un fin en si mismo solo si implica que la conciencia evoluciona junto con el proceso de conocer. Y si contemplamos la evolución de la conciencia en el planeta Tierra esto parece ser en efecto lo que ocurre: que el proceso de conocer sirve al desarrollo mismo de la conciencia viviente. En el caso del ser humano esto equivale al carácter histórico de su conciencia, es decir, al hecho de que la conciencia humana va cambiando a medida que se informa de la realidad que la rodea y de su propia existencia y ese cambio es un cambio que va generando su historia, la historia de los pueblos y de la humanidad en general.

La evolución de la conciencia a partir de la adquisición del conocimiento depende no solo de la calidad o cantidad del conocimiento adquirido sino de la manera en que la conciencia disponga de ese conocimiento. Puede disponer de ese conocimiento para cambiar ella misma, algo que suele hacer el ser humano sobre todo en épocas revolucionarias, o puede disponer de ese conocimiento para hacerse más poderosa, para adquirir dominio sobre el objeto conocido y extraer de él materiales, energía, etc. puede simplemente acumularlo y esperar la oportunidad para hacerlo efectivo, y así sucesivamente. Si se trata de una conciencia comunicativa como la comunicación es una via por la cual el conocimiento pasa de una conciencia a otra el desarrollo de la conciencia depende en este caso del modo en que se comunica con las otras conciencias. Lo ideal es que el conocimiento pase de una conciencia a otra lo más libre y completamente posible pues esto conduce a que las conciencias complementen su esfuerzo por evolucionar potenciándose mutuamente...este es ideal que suelen perseguir aquellas altas personalidades que quieren que los seres humanos salgan de la ignorancia. Una gran solidaridad comunicativa es el ambiente más apropiado para la adquisición de conocimiento y la evolución de las conciencias. Pero puede suceder, en distinto grado, que las conciencias se reserven en secreto alguna parte o la mayor parte de los conocimientos que han adquirido y no los comuniquen. ¿Porqué? Porque de este modo, practicando el secretismo, ocultando, pueden, por ejemplo, engañar, o pueden hacer trampas, o pueden encontrar el modo de dominar a otras conciencias a través de la ignorancia que hay en ellas. El conocimiento en este caso es utilizado por la conciencia como una herramienta para vencer a las otras conciencias e imponer su voluntad. La practica del secreto es una práctica contraria a la solidaridad comunicativa aunque también hay formas intermedias entre el ocultamiento y la plena solidaridad en el conocer...como lo que ocurre cuando el autor de un invento solo lo revela a cambio del beneficio propio. El conocimiento puede, entonces, convertirse en una mercancia, y en ese caso si bien no hay ocultamiento también es cierto que solo puede alcanzar el conocimiento quien puede pagar por él...lo cual también es, en parte, contrario a la solidaridad comunicativa y mantiene a unos seres más informados que otros de modo que hay injusticia y dominación también aunque moderada por la posibilidad de la compra y la venta del conocimiento. Por supuesto que siendo esta una actividad que nos aleja del ideal de un conocimiento de todos y para todos que nos haga a todos menos ignorantes...hay que pensar muy bien la manera en que podremos llegar algun dia a vivir comunicandonos solidariamente el conocimiento para que cada cual adquiera el suyo con libertad y de acuerdo a sus capacidades psíquicas, sin restricción económica o política alguna. Hoy dia el conocimiento está muy mal repartido entre los seres humanos, se oculta, se compra y vende, y esto significa que estamos muy lejos de vivir en un mundo solidario.

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