El reconocido lingüista Eugenio Coseriu (1), aseguró que todos los hablantes son o somos "políglotas" aunque no hayamos aprendido más que nuestra Lengua (o variedad) materna. ¿Por qué asegura Coseriu algo que suena tan extraño? Porque está considerando la diversidad de variedades lingüísticas que conoce y maneja un hablante en sus diferentes interacciones o situaciones comunicativas.
Parte de diferenciar lo que llama "Lengua Histórica", la Lengua entera, la que incluye todas las variedades y variantes a lo largo del tiempo, desde la de la literatura hasta la de las diversas modalidades populares y la distingue de lo que denomina "Lengua funcional". Y es esa lengua la que el hablante, efectivamente utiliza. Ningún hablante usa la lengua toda o la lengua histórica. Se maneja con lo que le es funcional en un tiempo, en un lugar, en una situación comunicativa: de ahí las tres dimensiones que Coseriu considera que se ponen en juego en un acto de habla: la sincrónica (a través del tiempo), la diastrática (a través de los diferentes estratos socio-culturales) y la diafásica (a través de los diversos estilos).
Pero en su lengua funcional el hablante sólo puede hablar en un determinado tiempo (sincrónico), en un determinado nivel socio-cultural (sinstrático) y en un solo estilo o registro (sinfásico) Como el lector deducirá, es imposible hablar, a la vez, en todos los estilos desde el más informal el más formal, en las variedades de todos los niveles socio-culturales y en todas las modalidades que los diversos tiempos van imprimiendo a la Lengua histórica.
Un hablante se sitúa, entonces y siempre que profiere un enunciado, en un tiempo, en un nivel socio-cultural y en un estilo determinados.
Esta introdución creo que es suficiente como para podernos plantear el tema que nos interesa tratar aquí: el de la diversidad de estilos de los que nos valemos para comunicarnos.
Nos pareció interesante tomar como objeto de reflexión el tipo de interacciones que se dan en esta misma Red Filosófica, como los estilos más habituales. Nos ubicaríamos, entonces en un nivel sincrónico, sinstrático y sinfásico, considerando la posible generación a que pertenece el interlocutor, su nivel socio- cultural básico, así como el estilo que utiliza.
He notado y en algunos casos me ha llamado la atención, la diversidad de estilos o registros lingüísticos que se exhiben en los textos de la Red.
Dentro del continuum entre un Polo Formal (alcanzando el solemne) hasta un Polo informal (llegando hasta el "íntimo"), pasando por todas las variantes intermedias, he observado mucha variación en lo que se exhibe como producció escrita en esta Red.
Desde las formas de tratamiento que van desde lo impersonal hasta el tratamiento de tu o de vos y el de Ud. con sus correspondientes formas verbales, han emergido en situaciones adecuadas, casi siempre, y algo inadecuadas la menor cantidad de veces. Aclaro que esto no pretende ser un estudio cuantitativo que implicaría tomar todo el corpus escrito y cuantificar y ubicar dentro de ese continuo las diversas ocurrencias. Se trata de impresiones, observaciones de lo que me ha llamado más o menos la atención de lo que he percibido. Por esto me permitiré hablar en general, ejemplificando únicamente en algún caso que recuerde como muy notorio o "fuera de lo esperable", cuando corresponda.
El texto o discurso (los tomaremos como sinónimos para este trabajo), tanto orales como escritos, poseen tres propiedades según varios autores, los primeros Hallyday y Hasan (2) quienes iniciaron estos estudios del texto como unidad: Coherencia, Cohesión y Adecuación.
Es claro, que según lo que anunciamos, nos centraremos en la adecuación de los textos. Adecuación a tres factores: ámbito, interlocutor y tema.
Observemos las "Formas de saludo inicial y final", como marcos del texto y tomemos como paradigma la modalidad del Administrador de esta Red, el amigo Fernando Gutiérrez. En general, Fernando se dirige a los miembros de la Red de un modo intermedio, ni extremadamente formal, ni extremadamente coloquial, se percibe como adecuado a los tres factores antes señalados: ámbito, interlocutor y tema: "Estimado fulano! o simplemente "Fulano" (si la interación es de ida y vuelta frecuente) o con omisión del interlocutor e ida directa al tópico. En lo que refiere al cierre, utiliza -generalmente: la forma "Un abrazo, Fernando" o "Un cálido abrazo, Fernando". Cito a nuestro administrador porque es, necesariamente, quien marca de alguna manera la modalidad de tratamiento general en este sitio, ciertas pautas implícitas que los miembros siguen en el nivel "diafásico"-"sinfásico"(estilos, registros) a la hora de sus producciones escritas.
Consideremos, también, que en este sitio escriben miembros que usan distintas "Normas" o variedades del español de América y España: Argentina, Bolivia, Chile, Colombia, Costa Rica, Cuba, Ecuador, Méjico, Perú...
Nos limitaremos al uso de los hablantes "rioplatenses" porque sería inabarcable la totalidad, aunque la mayoría se ciñe al Español estándar de las diferentes denominadas "Norma Culta", bastante coincidentes en América.
En el uso de estos miembros que elegimos para acotar el corpus, encontramos La forma de saludo inicial del tipo: "Hola, más nombre de pila y cierre con "Saludos, más nombre" es también habitual. La forma de saludo de cierre "nombre de pila" o "nombre y apellido" dependen de la proximidad o conocimiento entre los interlocutores o de si el escrito va dirigido a todos los miembros de la Red, que -en general-lleva la modalidad "nombre y apellido" en el saludo final.
Otra forma común es: "saludos a todos", ampliando los destinatarios del mensaje a todos los miembros de la Red.
Se observa. también, una omisión de saludo y cierre, cual es la de inscribir un texto que...no va dirigido, explícitamente a ningún destinatario en particular. El texto se ingresa y sostiene con su título y autor que se exhibe junto al mismo.
Todas estas formas, son -según nuestras convenciones-adecuadas al ámbito, interlocutor/es, y temas planteados.
Solamente señalo como...algo "inhabituales" los tratamientos de Ud. entre personas jóvenes y montevideanas o, por el contrario, de tú o vos para gente más lejana. Encontramos un saludo "chao o chau más letra inicial" q es bastante informal, e implica el conocimiento que de la persona emisora poseen los lectores.
Lo general, y que da consistencia en el nivel de la "adecuación" a estas páginas, es un uso de la variedad "formal" de nuestra lengua estándar, con todos los grados que la misma ofrece.
Me parece interesante plantear este tema de nuestro desempeño lingüístico en esta Red que compartimos y en este nivel de una de las propiedades del texto : adecuación, para hacernos más concientes de cómo nos vinculamos entre nosotros y con nuestra lengua.
Es notorio, también, que algunos miembros usan en el mismo texto una gama interesante de registros de lengua: desde un formalísimo estilo del habla jurídica , hasta el coloquial del barrio o habla entre amigos íntimos. Vale y enriquece el tema registros, si se hace con buen manejo de la lengua y sus variedades. También el paradigma que usé para comenzar, el estilo de Fernando Gutiérrez, se permite alguna convivencia de registros, para enfatizar las apelaciones o contenidos de sus textos. Igualmente, quien esto escribe. A veces, nos acercamos más a la "oralidad en la escritura" que a las mismas reglas del "código escrito"(3)
Este texto sólo intenta abrir una reflexión, con un corpus de artículos que nos es común. Para nada pretende estalecer pautas ni maneras "buenas o malas" de escribir o expresarse. Ya he explicitado que la Lingüística es una disciplina descriptiva y no normativa. También, quien haya leído mi artículo "La Verdad" y la Real Academia", puede tener esta claridad acerca de mi intención.
Saludos a todos, María
Bibliografía:
/1) Teoría del lenguaje y lingüística general, Eugenio Coseriu. Gredos, 1974
(2) Cohesion in English, Halliday & Hasan - de MAK Halliday - 1976
(3) Describir el escribir. Daniel Cassany.1979.
Etiquetas: Adecuación, Lengua, Registros, Variedad, funcional
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