Proyecto Homo: Planteamiento Inicial (III), por Carlos Sequeiro

Crear una conciencia colectiva basada en lo humano.
Sabiendo de donde venimos, lo que somos y a donde vamos y apoyada en la razón, con la firme convicción de que podemos hacer las cosas de otra forma, sin limitaciones. Para todos los seres humanos.
Los apartados que siguen no están expresados en clave científica ni son exhaustivos, todo lo contrario pretenden hacerse comprender por todo ser humano que tenga acceso a estos documentos.
Para los que quieran profundizar se ha elaborado una guía bibliográfica con la que completar los contenidos.
Siempre que un grupo adquirió conciencia de las ventajas de un cambio, asumiendo sacrificios en aras del beneficio de la Sociedad de la que forma parte, se produjo un avance significativo en lo humano y en lo social. Aunque visto desde la distancia del tiempo, el esfuerzo es errático porque el sacrificio no se mantiene en el tiempo. Las generaciones beneficiadas dilapidan el activo y los sacrificados no saben transmitir a esas generaciones la motivación que les impulsó y dio sentido a su sacrificio, porque las circunstancias cambian.
Las distintas revoluciones, hitos de un proyecto inacabado han propiciado cambios significativos en la organización y consideración de la vida en común.
Pero el proyecto está inacabado y pendiente de actualizar, sempiternamente pendiente de actualizar, ya que la propia evolución lo desvía de sus planteamientos y de sus objetivos.
Proyecto Homo pretende desde la humildad y la razón a través de una ideología objetiva basada en lo humano, aportar coherencia con sus razonamientos para encontrar respuestas a la problemática actual, invitando a la vertebración, articulación, puesta en marcha y actualización de los rápidos cambios en los que vivimos.
Para ello invita a la reflexión y discusión de su ideario a través de aportaciones intelectuales y foros de discusión.
La actual crisis de valores como concepto universal viene propiciado por el abusivo y acaparador valor de lo económico, que fagocita los otros valores para excretarlos como versiones de valores económicos.
Los que se sienten desamparados y vacíos buscan desesperadamente para ellos o los suyos alternativas donde sentirse libres a la opresión del dinero y poder aliviarse con alguna satisfacción "gratis".
La falta de alternativas coherentes y laicas, les entrega de nuevo a la religión que muchos de ellos repudiaron con su razón.
Es un momento adecuado para la vertebración de un espacio básico y de valores debidamente estructurado que cumpla con las expectativas de la razón.
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